Delito fiscal
El delito fiscal, también llamado delito contra la Hacienda Pública, se comete cuando una persona o empresa elude de forma intencionada el pago de impuestos mediante ocultación de ingresos, falseamiento de datos o uso de estructuras ficticias.
Supone una grave infracción del deber ciudadano de contribuir al sostenimiento de los servicios públicos.


Preguntas frecuentes sobre el delito fiscal
¿Cuándo se considera que hay fraude fiscal?
Cuando se supera el umbral de 120.000 € defraudados por ejercicio fiscal y hay intención de engañar a la Administración.
¿Qué pena puede conllevar?
De 1 a 5 años de prisión y multa del tanto al séxtuplo de lo defraudado, además de la devolución del dinero.
¿Qué sucede si la cantidad defraudada no excede de 120.000 euros?
Se considerará una infracción administrativa y podrá conllevar una multa, pero no será delito.
¿Y si declaro mal sin querer?
Si no hay dolo (intención), no es delito. Puede tratarse de una infracción administrativa corregible con recargo e intereses.
¿Qué pasa si regularizo antes de que me investiguen?
Si se regulariza de forma voluntaria antes de tener conocimiento de una inspección, se puede evitar la responsabilidad penal.
¿Cuándo prescribe el fraude fiscal?
A los 5 años desde la comisión del hecho, aunque puede ampliarse si se interrumpe el plazo por actuaciones judiciales o administrativas.
¿Necesitas ayuda?
Como abogado especializado en derecho penal económico, si estás siendo acusado de un delito fiscal, puedo ayudarte.