Delito de malos tratos: claves legales y consecuencias para el autor
El delito de malos tratos sanciona los actos de violencia o trato degradante que atentan contra la integridad física o moral de una persona, aunque no causen lesiones graves. Está penado con prisión o trabajos en beneficio de la comunidad y protege la dignidad y seguridad personal frente a cualquier forma de agresión.
BLOG
11/4/20254 min read


El delito de malos tratos se encuentra regulado en el artículo 147 y siguientes del Código Penal y tiene por objeto proteger la integridad física y moral de las personas frente a conductas violentas o agresivas que, sin llegar a causar lesiones graves, suponen un atentado contra la dignidad y seguridad personal.
A diferencia de los delitos de violencia de género o doméstica, el delito de malos tratos no requiere una relación específica entre autor y víctima, por lo que puede cometerse en cualquier contexto: personal, familiar, profesional o incluso entre desconocidos.
¿Qué se entiende por delito de malos tratos?
El delito de malos tratos castiga aquellas conductas consistentes en golpear o maltratar a otra persona sin causarle lesión que requiera tratamiento médico o quirúrgico.
La clave está en que, aunque no exista una lesión grave, la acción constituye una forma de violencia o agresión física o psíquica que vulnera la integridad personal.
Ejemplo: empujar, abofetear o golpear a alguien durante una discusión sin llegar a causar lesiones médicamente relevantes.
Este delito también puede abarcar comportamientos de maltrato psicológico, como humillaciones o vejaciones leves, cuando tienen la finalidad de menospreciar o intimidar.
¿Qué elementos deben concurrir para que exista delito de malos tratos?
Para que una conducta pueda considerarse delito de malos tratos, deben cumplirse los siguientes requisitos:
1. Existencia de una acción violenta o degradante
Debe existir un acto físico o psicológico de agresión, aunque no produzca una lesión objetivable. Basta con el maltrato o la vejación.
Ejemplo: lanzar objetos contra otra persona en una discusión o zarandearla con fuerza sin dejar marca visible.
2. Intención de causar un perjuicio o trato degradante
El autor debe actuar de forma voluntaria y consciente, con ánimo de menospreciar o causar daño físico o moral.
Ejemplo: insultar o humillar públicamente a una persona de forma reiterada con la intención de denigrarla.
3. Ausencia de justificación o causa legítima
El acto debe carecer de amparo legal o justificación, descartando supuestos de defensa propia o actuaciones profesionales con respaldo jurídico (por ejemplo, uso legítimo de la fuerza por parte de un agente en cumplimiento de su deber).
¿Cuáles son los casos más habituales de malos tratos?
En la práctica judicial, el delito de malos tratos aparece en contextos muy variados, entre ellos:
Disputas personales o vecinales: agresiones leves o empujones en conflictos cotidianos.
Ejemplo: un vecino que golpea a otro durante una discusión por ruidos o límites de propiedad.
Entornos laborales o profesionales: agresiones físicas o humillaciones públicas entre empleados o superiores jerárquicos.
Ejemplo: un encargado que abofetea a un trabajador tras una disputa en el trabajo.
Conflictos familiares no conyugales: entre padres e hijos, hermanos o familiares sin relación de pareja.
Ejemplo: discusiones familiares en las que se producen empujones o amenazas sin causar lesión.
Ámbitos escolares o deportivos: agresiones o vejaciones sin resultado lesivo que exceden el ámbito disciplinario.
Ejemplo: un entrenador que humilla reiteradamente a un menor o lo golpea levemente como castigo.
¿Qué penas se aplican en el delito de malos tratos?
El artículo 147.3 del Código Penal prevé que cuando la acción violenta no cause lesión o esta no requiera tratamiento médico o quirúrgico, el hecho se considera delito de malos tratos.
Penas aplicables:
Prisión de seis meses a un año, o
Trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 80 días,
Además de la posible privación del derecho a portar armas de 1 a 3 años.
El juez puede imponer también prohibición de aproximarse o comunicarse con la víctima, si lo estima necesario para su protección.
Diferencias entre el delito de malos tratos y otros tipos de lesiones o violencia
Lesiones (art. 147.1 CP): implican un daño físico o psíquico que requiere tratamiento médico o quirúrgico.
Ejemplo: fractura, contusión grave o traumatismo que necesita puntos o medicación específica.Vejaciones o injurias leves: ofensas verbales o conductas que no conllevan contacto físico, pero atentan contra la dignidad.
Ejemplo: insultos reiterados o gestos humillantes en público.Violencia doméstica o de género: requiere una relación de afectividad o convivencia con la víctima, y se regula en el art. 153 CP.
Ejemplo: agresión leve dentro de una pareja o expareja.
¿Qué hacer si te acusan o eres víctima de malos tratos?
Tanto si se ha sufrido una agresión como si se ha recibido una acusación, es fundamental actuar con rapidez y asesoramiento especializado:
Si eres víctima:
Acude a un centro médico para obtener un parte de lesiones o constancia médica.
Denuncia los hechos ante la Policía o el Juzgado de Guardia.
Conserva pruebas (testigos, grabaciones, mensajes, etc.).
Si eres investigado:
No declares ante la Policía.
Nombra de forma inmediata un abogado penalista de tu confianza
Aporta pruebas que acrediten tu versión o, en su caso, la existencia de una provocación o legítima defensa.
En ambos casos, la intervención de un abogado penal especializado es determinante para enfocar correctamente la estrategia procesal.
Consecuencias adicionales del delito de malos tratos
Además de la pena principal, una condena puede implicar:
Antecedentes penales.
Pérdida de credibilidad profesional, especialmente en profesiones públicas o con trato con personas vulnerables.
Daños morales o económicos, por la indemnización a la víctima.
Medidas de alejamiento o suspensión de visitas, en caso de vínculos familiares.
El delito de malos tratos protege la integridad física y moral de las personas frente a cualquier forma de agresión o trato degradante, incluso cuando no se producen lesiones. A menudo surge en conflictos cotidianos o personales y, pese a su aparente levedad, puede tener consecuencias penales y personales muy serias.
Si has sido denunciado o eres víctima de un delito de malos tratos, es fundamental contar con un abogado penalista que analice los hechos y defina la mejor estrategia de defensa o de acusación.
Puedes contactar conmigo AQUÍ.
